En su columna para Enredando las Mañanas, Martín Sotiru analizó el rol del salario en la actual política económica, la inflación y cómo se deteriora el poder adquisitivo en Argentina.
La economía es tema de todos los días y los salarios están en el centro de la disputa. Martín Sotiru, integrante de Otro Viento Medio, compartió en su columna en Enredando las Mañanas —el informativo de la Red de Medios Alternativos que los miércoles producen Radio Semilla y DTL— un panorama claro y crítico sobre la situación actual de los ingresos en Argentina.
“El salario Mínimo, Vital y Móvil cayó un 30% desde que arrancó el gobierno de Milei”, advirtió.Y eso impacta en toda la sociedad ya que el salario Mínimo Vital y Móvil es la base para discutir cualquier salario y también los planes sociales. A ese dato se le suma, explica Martín, el de la inflación que no ha acompañado: “Hoy en día está un 14% más bajo que en los años 90”.
Para explicar este eje Martín comenta una creencia instalada respecto al tema, muchas veces se cree que si los salarios suben un 3%, los empresarios suben los precios un 3%, pero no se tiene en cuenta que el costo salarial no es el único costo dentro de una estructura de una empresa. “Hay empresas que tienen mucho mayor peso en la mano de obra y otras que no”.
Salarios estancados
En cuanto a la evolución reciente, Sotiru repasó el impacto de la devaluación de diciembre 2023: “Hubo una fuerte caída del salario en los primeros meses del gobierno. Después, sobre todo en el sector privado registrado, hubo cierta recuperación, pero en noviembre se estancó. Desde entonces, los salarios reales no crecen”.
Un dato clave que aporta es la diferencia entre inflación y aumentos salariales es el que indica Hernán Letcher, el director del Centro de Economía Política Argentina (CEPA) que el IPC fue de 3,7% y por su parte, el promedio de las paritarias fue 1,9%.
Otro punto no menor es que en el acuerdo con el FMI dice específicamente que para ellos, los salarios en dólares están caros. “Eso le da pie a Milei para decir ‘No vamos a permitir paritarias por encima del 1%’, cuando en realidad, la inflación está lejos de llegar al número que habían prometido”.
“El gobierno que habla tanto de la libertad no permite las paritarias libres”
Incluso cuando hay acuerdo entre sindicatos y patronal, indica Martin, “el gobierno no homologa esos acuerdos paritarios”. Lo que busca con esto, concluye, es que la inflación se estabilice pero a costa de “deprimir los ingresos populares”.
Mientras tanto, las luchas y movilizaciones crecen, aunque, dice Sotiru, el discurso oficial mantiene eficacia: “No podes tapar el sol con las manos pero discursivamente ha instalado muchas muchas falacias o verdades a medias”.
Una de esas es por ejemplo, que los salarios crecieron en dólares, porque si bien es así, “también creció la canasta básica en el mismo sentido o más y cambió la composición del gasto de la familias según lo que indica el INDEC».
Eso impacta directamente en la rutina: “Hoy los primeros días del mes se van en pagar servicios. Y la suba del transporte afecta a toda la clase trabajadora. Muchos de estos datos subieron dieron tres veces la inflación y no se ven en el dato, pero sí lo vemos en el bolsillo”.