Mirá Violeta. Capitulo 31: Marcar la cancha
Llega la hora del partido. Prendo la tele, agarro una birrita y me siento en el sillón. Y ahí está con la casaca 22. Jugando como si nada. Villa. El vivo ejemplo de lo que pasó y sigue pasando históricamente en el fútbol: complicidad machista. Alguien que tiene dos procesos judiciales en curso por violencia de género pero claro… la rompe toda entonces ¿Cómo no va a jugar?
Nos propusimos crear pequeños relatos feministas que expresan nuestro mirar violeta partir de vivencias cotidianas. Primero nos pusimos los lentes para mirar mejor pero ahora prendimos los micrófonos.
Tenemos historias, somos palabras que construyen nuestro camino, estamos dispuestas a rompernos y rearmarnos en mil voces que están listas para ser escuchadas ¿Te lo vas a perder?
Ilustración: Sheila Clidas