Luego de casi cinco años, la Línea de atención a víctimas de violencia de género de Provincia de Buenos Aires pasará a ser parte formalmente del Ministerio de las Mujeres, Políticas de Género y Diversidad Sexual. Una lucha más lograda por sus trabajadoras que desde el inicio vienen exigiendo la estatización. La decisión fue anunciada por la ministra Estela Díaz el #8M y comenzaría a regir en junio del corriente año.

A nivel provincial en octubre del 2016 durante la gestión de María Eugenia Vidal fue creada la Línea 144 que contaba en ese entonces con 70 operadoras. Y, como hasta la fecha, funciona las 24 horas de los 365 días del año.  Previo a esta experiencia, existía el Programa AVM (Atención a Mujeres Víctimas de Violencia de Género) creado en el año 2007. 

Bajo el mando de la ex gobernadora, Agustina Ayllón -quien fuera la subsecretaria de Género y Diversidad Sexual- y Débora Schwartzberg -ex directora-, las trabajadoras vivieron un combo de violencias laborales: despidos, maltratos y contrataciones irregulares.

En ese entonces, existían diversas modalidades de contratación, la gran mayoría dependía  de Provincia Net, una empresa privada, otras tenían contratos como monotributistas y algunas pocas eran parte de la  Secretaría de Derechos Humanos .

No sólo las condiciones laborales eran denunciadas por sus trabajadoras, sino que también, el funcionamiento de la política “pública” era objeto de preocupación. Para el año 2019 el presupuesto destinado por mujer en materia de violencia era de 11 pesos. 

En ese contexto, cinco trabajadoras fueron despedidas por ejercer su derecho a huelga con la intención de conseguir mejoras en el funcionamiento de la Línea (ver más). Ante esta situación, las trabajadoras organizadas y acompañadas por la militancia popular realizaron festivales, paro de tareas y numerosas asambleas. Consiguieron llegar a mesas de diálogo con la gestión y lograron que tres de las cinco trabajadoras fueran reincorporadas en otras áreas de la secretaría de Derechos Humanos. 

Con la nueva gestión, esta política pública quedó en manos del flamante Ministerio de las Mujeres, Políticas de Género y Diversidad Sexual, a cargo de Estela Díaz y bajo la dirección de Romina Pereyra. Sin embargo, hasta la fecha eso no significó un cambio debido a que las operadoras seguían contratadas por Provincia Net. Es decir, que quienes sostienen la atención y asesoramiento de la Línea 144, uno de los eslabones para tratar una de las mayores problemáticas de la actualidad como es la violencia de género, seguían siendo consideradas en los papeles como “empleadas de comercio”.

Desde los inicios de la cuarentena, la Línea 144 fue considerada un “servicio esencial”, es decir que sigue funcionando las 24 horas todos los días. Hasta la fecha, como medida de seguridad atienden grupos de 3 o 4 operadoras por turno en lugar de las 10 u 11 que suelen conformar el equipo de trabajo. En diálogo con este medio, las trabajadoras indicaron que, por un lado, la coordinación con otras áreas del Estado estaban siendo muy difíciles, y por el otro, que sus condiciones como trabajadoras tampoco mejoraban (leer más) 

Hoy después de años de violencia laboral y políticas “de cartón” la estatización es un hecho. Este logro, producto de la lucha de sus trabajadoras, representa un triunfo en términos de derechos laborales para quienes vienen sosteniendo la tarea hace tiempo. Pero también, significa que la política pública sea reconocida como parte del Estado por más paradójico que parezca. El nuevo desafío comienza y nuevas preguntas surgen ¿cómo será esta Estatización? ¿Qué sucederá con el reconocimiento de los 5 años de trabajo previos? ¿Qué otras políticas acompañarán la atención telefónica? 

Está en las manos del Estado y del gobierno de turno en profundizar las acciones para poder hacerle frente a una violencia que crece acompañada del mal funcionamiento de instituciones judiciales y policiales. Hoy festejamos el triunfo, pero como siempre, estaremos en alerta permanente.